Comunicado del área animalista y del área de salud

Desde el área animalista y desde el área de salud de Esquerra Unida del País Valencià, nos gustaría trasladar a la ciudadanía nuestra opinión sobre las últimas noticias sobre los “bous al carrer” y sobre que el Sistema Público de Salud pague la diferencia entre el coste asegurado y el real en los “festejos” taurinos.

Van dos votaciones en un corto periodo de tiempo en el que el PSOE-PSPV se aparta del “Botànic” y se alía a las derechas en políticas contra los derechos de los animales. La primera fue en la enmienda que quitaba la protección a los perros utilizados en la caza en la futura ley de protección animal y la segunda la que mencionamos en el párrafo anterior.

Desde hace más de una década nuestra organización es estatutariamente antitaurina, aunque quizás ese término debería cambiarse, ya que somos nosotras las que defendemos a los toros y no los que se autodenominan defensores de “la fiesta”.

Nuestra organización siempre ha defendido y lo seguiremos haciendo, un sistema de salud público, universal y gratuito. Para mantener este modelo es importante hacer una correcta gestión del presupuesto. Primero, por la propia sostenibilidad del sistema sanitario y segundo por la importancia de realizar un uso correcto del dinero de todas las valencianas y valencianos. 

Que se establezca que la Conselleria de Sanidad y Salud Pública se haga cargo de costes que deberían ser cubiertos por las aseguradoras o, en última instancia, por los ayuntamientos, peñas o empresas organizadoras es una barbaridad. Se trataría de una nacionalización de los gastos, mientras se privatizan las ganancias de estos negocios.

Por supuesto que no estamos en contra de que las personas que sufran un accidente en este tipo de espectáculos reciban una atención médica gratuita, pero esta ha de ser cubierta por el seguro de dicho “espectáculo” y subsidiariamente por los responsables del mismo.

Algunos hablan de que esto supondrá un coste mínimo para la administración pública; Pero cabe recordar que el número de heridos de diversa consideración está siendo de entre 400 y 500 heridos cada año y que en algunos casos los costes de hospitalización han sido de entre 70.000 y 90.000 euros por paciente hospitalizado. Se calcula que alrededor de un millón de euros, de nuestros impuestos, supondría el gasto en sanidad pública destinado a tal fin, extraído de otros previstos en atención a pacientes comunes de otra índole.  Pero como decimos, no se trata de que cueste poco o mucho al presupuesto público valenciano, se trata de una gestión eficiente de los recursos y de que exista una responsabilidad por parte de los organizadores de lo que ocurre en sus “espectáculos” y, por otro lado, no se cree un agravio comparativo con otras manifestaciones festivas que sí son responsables de los costes ocasionados en caso de accidente mediante sus correspondientes pólizas de seguro. En resumen, desde el Área Animalista y desde el Área de Salud de EUPV, nos oponemos a que un solo euro de dinero público se destine a sufragar gastos por accidentes, por otra parte, evitables, en “espectáculos” taurinos. Han de ser los organizadores quienes asuman la diferencia entre el coste asegurado y el real, no la ciudadanía.