Izquierda Unida presenta al Ayuntamiento un escrito sobre los proyectos de centrales fotovoltaicas
Desde Izquierda Unida de Villena hemos presentado al Ayuntamiento por escrito un documento en que solicitamos que se tomen medidas para ordenar y regular de forma correcta los proyectos de centrales fotovoltaicas que se han presentado y que afectan a nuestro entorno, uniéndonos de esta manera a diez colectivos y asociaciones del Medio y Alto Vinalopó.
En este documento exponemos la situación actual, en la que han aparecido un aluvión de proyectos para colocar este tipo de instalaciones en suelo rural al amparo de un decreto de la Generalitat Valenciana que promueve las instalaciones de energías renovables y que grandes inversores han aprovechado para hacer negocios muy rentables a costa del suelo, el paisaje y los valores naturales de varios municipios.
Algunas de estas propuestas que afectan al Medio y Alto Vinalopó superarán las 2700 hectáreas y concentrarán más del 20% de la energía que se pretende instalar en toda la Comunidad Valenciana hasta el año 2030. Además, en el caso de Villena, los proyectos se encuentran colindando y afectando gravemente a espacios protegidos como Sierra de Salinas, Cabecicos de Villena… Espacios protegidos por la Red Natura 2000 y refugio de especies emblemáticas o en peligro de extinción.
Estas instalaciones serán visibles prácticamente desde cualquier punto de las dos comarcas y que van a limitar el posible desarrollo de la agricultura o del turismo de interior, además de poner en peligro los paisajes del vino y la identidad de los diferentes municipios.
Ya en el mes de noviembre el Ayuntamiento de Villena trató este asunto quedando prácticamente en un acuerdo de papel mojado. Es por eso que solicitamos junto a colectivos y asociaciones del Medio y Alto Vinalopó que este asunto se vuelva a poner sobre la mesa, que se valore la suspensión de las licencias para estas macroinstalaciones, que se tome una postura común y que se solicite a la Conselleria de Territorio la elaboración de un Plan de Acción Territorial. Se trata de una herramienta que permite analizar el territorio y ordenar los espacios en los que sería compatible instalar las plantas solares sin comprometer paisajes, turismo y el medio ambiente de la comarca.